TRASTORNOS INFANTILES Y JUVENILES
Dificultades en la infancia y adolescencia
¿ Qué señales nos indican que hemos de acudir a un psicólogo infantojuvenil?
Tratornos infantiles y juveniles
Hay que buscar ayuda siempre que aparezca alguna preocupación sobre si lo que le ocurre a tu hijo es normal o no, si se trata de una simple etapa en su desarrollo o por el contrario hay algo que está interfiriendo en él. Algunas orientaciones que nos pueden ayudar:
- Cuando notamos que el niño tiene dificultades para aceptar las normas de la familia. Se rebela contra ellas y se enfada muy fácilmente cuando se le pide que haga alguna tarea de la casa.
- Cuando de manera continuada el niño está implicado en peleas: con compañeros del colegio, amigos o sus hermanos y los profesores le llaman la atención porque molesta a los demás y no permite seguir el ritmo de la clase.
- Cuando notamos que el niño tiene un cambio importante en su conducta y esto permanece en el tiempo: esta más inquieto, se muestra más hostil, aparecen regresiones, conductas que corresponden a un niño más pequeño.
- Cuando la familia atraviesa por un momento difícil y los padres sienten que esto está afectando a su comportamiento: pérdida del trabajo de alguno de los padres, cambio de colegio, muerte de un familiar, una enfermedad grave, separación o divorcio de los padres etc.
- Cuando aparecen en el niño dolores físicos sin causa médica
Patologías de trastornos infantiles 0-6 años
- Trastornos infantiles alimentarios: rechazo a alimentos, dificultad en pasar de alimentos líquidos a sólidos, vómitos, berrinches para comer.
- Trastorno del sueño: dificultad para conciliar el sueño, insomnio, falta de hábitos, terrores nocturnos.
- Trastornos infantiles del desarrollo: retraso en la motricidad en el lenguaje, en la capacidad de adaptación y alteraciones en el establecimiento del vínculo.
- Trastornos psicosomáticos: problemas respiratorios, dermatológicos o gástricos.
- Trastornos de conducta: ansiedad, fobias, conductas de evitación, inseguridad, conducta oposicionista o agresiva, hiperactividad.
- Vivencia de situaciones estresantes: rupturas familiares, intervenciones quirúrgicas, enfermedades crónicas (p. e. diabetes, asma) muerte de familiares, nacimiento de un hermano.
- Alteraciones en la eliminación (enuresis, encopresis).
- Retraso en el inicio de la adquisición de los aprendizajes académicos.
Patologías frecuentes entre 6-18 años
- Dificultades en el ámbito escolar: disminución del rendimiento académico, dificultades de aprendizaje, falta de atención y concentración.
- Problemas de comunicación y de relación: aislamiento e inhibición de los compañeros, mutismo, tartamudeo.
- Problemas de conducta: conductas disruptivas, hurtos, fugas, agresividad, falta de control de los impulsos.
- Trastornos de ansiedad: fobia escolar, angustia al separarse o fobias hacia objetos o situaciones (perros, oscuridad, insectos, agujas…) crisis de angustia, preocupaciones excesivas.
- Trastornos del estado de ánimo: tristeza, desmotivación, euforia, irritabilidad, sentimientos de culpa o fracaso, cambios frecuentes de humor.
Nuestro modelo de trabajo con niños y adolescentes se basa en una evaluación inicial, en la que se realiza una valoración de las dificultades y de las necesidades que pueda tener el niño o adolescente.
A partir de los resultados obtenidos, realizamos un plan de intervención que ponemos en práctica en el mismo gabinete todo este estudio del niño o adolescente, y de su situación, se realiza a través de entrevistas con los padres, el niño, y si es necesario también con sus profesores.